Cantos de Penitencia - Joaquin Madurga

La presente producción discográfica, es fruto del buen maridaje artistico de Don José Antonio Olivar y del sacerdote Joaquin Madurga, quienes en el año 1984, se unieron para impregnar cuidadosamente la musica sagrada popular en acertados poemas (nacidos en la vivencia de la Semana Santa que paso J. A. Olivar en Alicante (España)) llenos de mucha vitalidad y un autentico mensaje cristiano.

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Aqui, les detallo un alcance de los autores (a manera de introduccion), con respecto a cada tema de esta obra musical:

HOY QUISIERA LLORAR IGUAL QUE PEDRO

Por desgracia, es la vida de los creyentes una vida jalonada de instantes en los que negamos a Dios. Entre otras cosas porque a Dios no solo se le niega en ocasiones solemnes o en publica fe de ateismo, sino en las mas pequeñas cosas y sucesos de a diario que nos hablan de el y que nosotros ni aceptamos, ni comprendemos ni analizamos a la luz de la fe. Negamos a diario a Dios. Y hay algo mas grave: el no reconocer que lo negamos. Estamos en consecuencia, muy distantes de saber llorar como Pedro lloro. Estamos, en una palabra, muy distantes del unico camino que nos queda a quienes hemos perdido la inocencia el camino del arrepentimiento

POR LA SEÑAL DE LA SANTA CRUZ

La señal de la cruz es el santo y seña del cristiano.

Es la señal de la cruz puerta de perdón a la vez que profesión de fe. Porque no nos conviene olvidarnos de donde venimos, que hacemos aqui y a dónde vamos, es preciso que hagamos con frecuencia la señal de la cruz. Siempre de forma alegre y optimista porque la cruz es anuncio de triunfo y de alegría, ya que es la cruz la paz que destruye a la guerra, amor que triunfa sobre el odio y luz que desgarra el manto de las tinieblas del pecado

POSTRADO ANTE LA CRUZ

A Dios, para saber como es de verdad hay que verlo crucificado.

Entre otras cosas, para recordar de vez en cuando, que hemos sido nosotros quienes lo hemos llevado a la cruz

Que sepamos ver siempre en todos los crucifijos la sangre que va por dentro, la tremenda verdad que encierran el misterio de un Dios hecho hombre que sube a la cruz porque quiso cargar con las culpas de todos sus hermanos los hombres.

MI VIDA ES ENCRUCIJADA

Nuestra vida es cruce de caminos, de posibilidades de oportunidades perdidas y de ocasiones que pueden llevarnos de golpe a despegar para siempre hacia mundos de altura espiritual, de panoramas mas evangélicos.

Y, en esa encrucijada que es nuestra vida, esta Dios Atento a cuanto le pedimos, deseando ayudarnos, esperando que le ofrezcamos, si no nuestras virtudes porque tal vez carezcamos de ellas al menos si nuestras miserias limitaciones, fracasos, decepciones.

CARGASTE A TUS ESPALDAS

Anchas espaldas tiene Dios: Carga Dios con todo lo que no queremos con todo aquello de lo que desertamos, a diario, por cobardia. Ancha, inmensa e infinita es la paciencia de Dios.

Pero, si cabe, mas infinito aun es su amor. Solo amando tanto se puede soportar tanto.

Jesus hoy como ayer, sigue cargado con nuestras injusticias y nuestras cobardias con nuestros vicios y nuestros miedos, con nuestro desencanto y nuestro odio, nuestra envidia y nuestra ira, nuestra angustia y nuestro desconcierto

LLORA SIEMPRE JESUS

Jesus sigue sufriendo y llorando porque hay hombres que sufren y lloran.

Soporta Jesus desprecio porque hay hombres despreciados por otros hombres.

Dios esta en los otros. Los otros son Jesus. Mil caras tiene, por tanto Dios esta en todos los que arrastran la amargura y muerden su lamento.

Siempre que despreciamos olvidamos, juzgamos y condenamos, estamos despreciando a Dios, olvidandonos de Dios juzgando y condenando a Dios

CIRINEO

Si es cierto que al mundo le hacen falta redentores no es menos cierto que lamben necesita urgentemente cirineos, personas que ayuden a otros, desde el anonimato, a cargar con la cruz que acrecientan los dias Cirineos que echen una mano a la angustia de los hombres al hambre de muchos, al dolor de tantos. Porque algo esta muy claro nadie puede cargar con su cruz si, a la vez, no lleva la de los otros.

Si todos formamos un solo cuerpo, tal vez sea una sola la cruz que hay que llevar.

Y, si cada cual no arrima bien su hombro, otros tendran que soportar un esfuerzo doble

EN TUS MANOS, SEÑOR...

La vida es cruz y en ella estamos clavados. Se hace, en consecuencia, necesario, que, al igual que Jesus crucificado, nos encomendemos al Padre. El sera quien nos ayude a liberarnos de los clavos de nuestra cobardía, de las hieles que el desencanto nos deja en nuestra boca, de las redes tejidas por nuestro egoismo.

Es cierto que no tenemos - como tuvo Jesus - muchas cosas que ofrecerle a Dios ya que nuestras vidas son grises, amorfas, tristes. Pero a falta de grandes virtudes y resplandores que ofrecerle, entreguémosle nuestra desgana, nuestra mediocridad.

Dios lo acepta todo. Y, al entregarselo, puede transformarnos en almas entregadas, valientes, decididas.

NO HAY CRISTO SIN CRUZ

A quienes sueñan una vida sin dificultades y una religion cargada de facilidades hay que gritarles.

No hay Cristo sin cruz. A quienes, en el fondo, entronizaran como virtud la comodidad, y consideran el sacrificio como algo propio de otra epoca, hay que repetirles. No hay Cristo sin cruz.

Y es que todo sigue igual el camino que lleva a la luz es siempre oscuro a la vez que sólo se puede vencer a la muerte cuando se entrega la vida. Estamos ante el misterio - siempre actual - del grano de trigo que, si quiere dar fruto tiene que caer en la tierra y morir.

NO ES LA CRUZ UN FINAL

La cruz nunca es un final es un comienzo. O, si se quiere, de un paso obligado. El cristianismo es una religión de optimistas porque tiene y ofrece siempre un final feliz Nosotros aceptamos el dolor y cargamos con el sufrimiento porque sabemos que nuestro final es final de esplendor y de gloria

La cruz no es un final sino un comienzo La muerte no es un termino sino un paso obligado El dolor no sirve para nada en si mismo, es tan solo un camino Al final de todo esta el triunfo, la apoteosis la gloria de la casa del Padre que nos espera con los brazos abiertos.